Infancia y adolescencia migrante no acompañada
Si hay un colectivo de personas con el que trabajamos en situación de especial vulnerabilidad son los niños, niñas y adolescentes que han llegado solos/as hasta nuestro país. Aunque no es un fenómeno fácil de cuantificar, en junio de 2019 había contabilizados en España por el Ministerio del Interior un total de 12.301 menores migrantes no acompañados.
Referidos en el argot técnico como ‘MENA’ (menores extranjeros no acompañados), estamos hablando de chicos y chicas menores de 18 años, migrantes, que se encuentran separados/as de sus padres y que tampoco están bajo el cuidado de ningún otro adulto.
Actualmente, y después de que la generalización del uso de este término (‘MENA’) en la esfera pública haya derivado en la deshumanización primero y la criminalización después de un colectivo en situación de extrema vulnerabilidad, debemos hablar de ellos y ellas como lo que son: niños, niñas y adolescentes que están solos/as y expuestos/as a un grave riesgo de exclusión y de desamparo.
En España, la realidad de los niños y niñas migrantes que se encuentran sin acompañamiento adulto está mayoritariamente asociada a los países del Magreb y, en particular, de Marruecos y Argelia. Sin embargo, también están presentes en nuestro país menores no acompañados que han llegado procedentes del África Subsahariana, Europa del Este y Oriente Medio.
Entre los motivos que llevan a estos niños y niñas a salir de sus países de origen se encuentran la pobreza y la falta de futuro y expectativas; situaciones de desestructuración familiar y desprotección institucional; catástrofes naturales; la guerra, la persecución, la violencia y situaciones de violación generalizada de los derechos humanos.
“Adolescentes como todos/as”

Tienen las mismas inquietudes, aficiones, esperanzas y necesidades que el resto de adolescentes de su edad pero su entorno familiar para darles afecto, acompañamiento y seguridad está muy lejos.
Desde Accem hemos impulsado la sensibilización, capacitación e implantación en España del acogimiento familiar de estos chicos y chicas como una alternativa de inclusión, protección y bienestar para ellos/as.
Hacemos
En Accem llevamos trabajando con niños y niñas en situación o riesgo de exclusión social desde hace más de 20 años, cuando en 1995 abrimos en Toledo el centro de acogida Albaraka. En todo este tiempo hemos proporcionado atención y acogida a menores en situación de desamparo, de origen autóctono y extranjero, tutelados por las distintas administraciones públicas, y hemos atendido específicamente al colectivo de niños y niñas migrantes que se encuentran sin acompañamiento adulto.
Nuestra prioridad es garantizar la protección y el bienestar de cada niño y niña acogidos/as, su desarrollo personal y su inserción, potenciando su autonomía y actuando sobre los factores que dificultan los procesos de integración social y laboral. Es también nuestro cometido acercar a la ciudadanía la realidad de unos/as niños/as y jóvenes que tuvieron que tomar muy pronto decisiones de adultos/as; que aprendieron a sobrevivir en la adversidad y siguieron adelante; que tuvieron la valentía de soñar una vida mejor y se lanzaron en su busca. Pero que, a pesar de todo, siguen siendo niños, niñas y jóvenes en situación de especial vulnerabilidad, con necesidad de apoyo y protección y con una ilusión enorme por una oportunidad y un futuro.
Acogida y apoyo a la autonomía
Contamos con pisos y centros de acogida en Aragón, Asturias, Castilla-La Mancha y Castilla y León. Son centros interculturales y abiertos, en los que ofrecemos a cada niño y niña una atención individualizada e integral, que responda a sus necesidades físicas, psicológicas, emocionales y sociales; en los que facilitamos el acceso a formación académica y ocupacional y desde los que impulsamos actividades de carácter cultural, lúdico y deportivo. En un ambiente normalizado e integrador, se potencia su autonomía y su inserción sociolaboral.
El desarrollo de nuestra labor y la experiencia acumulada nos llevaron a enfrentarnos a una realidad: cuando estos chicos y chicas llegaban a la mayoría de edad quedaban muy a menudo en una situación de desamparo y riesgo grave de exclusión social. Por este motivo comenzamos a impulsar programas y dispositivos orientados a jóvenes de entre 16 y 24 años que están a punto de incorporarse a la vida adulta pero que necesitan apoyos para culminar su proceso madurativo y conquistar su autonomía.

En Añón de Moncayo (Zaragoza) tenemos un centro de acogida con 14 plazas destinado a niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados. La ubicación del centro en la comarca de Tarazona orienta la intervención con los/as chicos/as hacia la inserción en el mundo rural, ofreciendo oportunidades reales de integración social y laboral y permitiendo también la renovación demográfica y el rejuvenecimiento de la comarca.
Por otra parte, llevamos a cabo el proyecto 17plus, en el que contamos con 37 plazas de acogida dirigidas a jóvenes migrantes no acompañados de más de 17 años, con un alto grado de autonomía y responsabilidad y que hayan tenido alguna medida de protección por parte del gobierno autonómico siendo aún menores. El objetivo es que su estancia en estos pisos sea un puente de transición hacia la vida totalmente independiente. El programa dispone actualmente de siete viviendas ubicadas en Zaragoza y Tarazona.

En la ciudad de Gijón trabajamos desde hace más de diez años con niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados que están tutelados por el gobierno autonómico. El primer centro se abrió en 2009 y el segundo en 2018, completándose las 16 plazas de acogida que existen actualmente, dirigidas a chicos y chicas de entre 14 y 18 años. Ambos centros se encuentran ubicados en comunidades de vecinos/as normalizadas con atención 24 horas por parte de un equipo interdisciplinar.
Por otra parte, Accem desarrolla en Asturias un programa de acogida a personas inmigrantes en situación de vulnerabilidad, con tres pisos y 18 plazas disponibles que se destinan, entre otros perfiles, a jóvenes inmigrantes con la mayoría de edad recién cumplida con el objetivo de impulsar su proceso de autonomía.
Asimismo, contamos con un programa en Gijón dirigido a facilitar la inserción sociolaboral de jóvenes de entre 18 y 30 años que procedan de instituciones de protección de menores de origen extranjero.

En Ávila contamos desde enero de 2019 con un hogar de acogida con diez plazas de capacidad para niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados/as que están protegidos/as por el gobierno autonómico. El centro está dirigido a chicos y chicas de entre 12 y 17 años y depende de la Gerencia de Servicios Sociales de la Junta de Castilla y León.

En Castilla-La Mancha trabajamos desde el año 1995 con menores en situación de riesgo tutelados por el gobierno autonómico. El primer centro de acogida lo abrimos en Toledo, a los que siguieron los que tenemos en Albacete, Cuenca, Guadalajara y Miguelturra (Ciudad Real). En total gestionamos actualmente un total de 58 plazas de acogida. Nuestros centros de acogida están destinados a niños, niñas y adolescentes en situación de desamparo, sean autóctonos o extranjeros, con medidas de protección por parte de la Junta de Castilla-La Mancha. Nuestra misión es cuidar y proteger a los menores acogidos, dotándoles de herramientas efectivas para conseguir una autonomía real cuando sean adultos.
Asimismo, desde 2012 tenemos en marcha programas de Autonomía Personal, orientados a facilitar el tránsito a la vida independiente de jóvenes cercanos a la mayoría de edad que han pasado por el sistema de protección. Diseñamos itinerarios integrales de inserción social y laboral y apoyamos, cuando es necesario, a estos chicos y chicas con plazas de acogida en viviendas compartidas. Actualmente trabajamos en proyectos de autonomía en las cinco provincias de Castilla-La Mancha, con 30 plazas de acogida en viviendas ubicadas en las cinco capitales provinciales (Albacete, Ciudad Real, Cuenca, Guadalajara y Toledo).
“Que me traten como a un niño”
Trepar paredes como Spiderman y marcar goles como Messi son sueños muy difíciles de lograr. Hay otros deseos que deberían estar al alcance de cualquiera. La campaña de Accem Que me traten como un niño, recuerda los derechos básicos de la infancia.
Vivir tranquilo; vivir en paz, son algunas de las respuestas que nos dieron ante las cámaras niños y adolescentes que han llegado hasta nuestro país sin la compañía de sus padres, madres y familiares. Piden que les tratemos como lo que son, menores que no han cumplido los 18 años.
Acogimiento familiar
Estamos trabajando a nivel estatal y europeo en explorar las posibilidades de desarrollar e impulsar el acogimiento familiar como una alternativa para apoyar a la infancia migrante no acompañada.
- Conoce nuestro proyecto EPIC.
- Descarga nuestro manual y kit de herramientas sobre “Acogimiento familiar y formas alternativas de asistencia a niños/as migrantes no acompañados/as y separados.
- Conoce nuestra experiencia en el programa FOR_UM: el acogimiento familiar para la infancia migrante no acompañada, una medida en favor de la inclusión social
- Escucha en este vídeo algunas experiencias de acogimiento familiar:
Derecho al asilo

Como entidad especializada en asilo, participamos en la red de expertos/as “Solidaridad de Responsabilidades”, desde la que impulsamos actividades de formación, sensibilización e incidencia en las que planteamos que los niños, niñas y adolescentes migrantes no acompañados pueden estar en condiciones de solicitar y recibir asilo.