Personas sin hogar
Las personas sin hogar representan la cara más severa de los procesos de exclusión social. Hablamos de personas que son privadas del acceso a un trabajo, a una vivienda y a los recursos económicos necesarios para su sustento. Personas que se enfrentan a la soledad, a la ruptura de sus vínculos sociales y familiares y, en consecuencia, a la pérdida de la verdadera red social imprescindible para la vida. La ausencia de un hogar o la imposibilidad de mantenerlo impiden el desarrollo de una vida digna. Esto es así porque una vivienda, además de cubrir la necesidad básica de alojamiento, seguridad y protección, proporciona un soporte clave para la creación de un proyecto de vida personal, familiar, social, relacional y de convivencia.
En los últimos años se ha extendido el uso del término sinhogarismo para hacer referencia al fenómeno social que afecta a las personas sin hogar. Utilizar este término permite ir más allá de las circunstancias individuales para hacer alusión a la existencia de factores estructurales con causas políticas, sociales y económicas que impiden el acceso a una vivienda digna y un empleo.
Más allá de tópicos e ideas preconcebidas no existen unas causas únicas y establecidas para explicar por qué una persona acaba viviendo en la calle. Existen normalmente una serie de situaciones estresantes (muerte de un ser querido, pérdida de un empleo, ruptura sentimental, pérdida de vivienda, etc.) que confluyen en un espacio reducido de tiempo, colocando a la persona afectada en una situación límite que no es fácil de superar.
Según la encuesta más reciente del Instituto Nacional de Estadística sobre personas sin hogar, de 2022, nuestro país cuenta con más de 28.500 personas sin hogar, una cifra que representa un incremento del 24,5% respecto a las personas identificadas en la encuesta realizada en 2012. No obstante, el número podría ser más elevado debido a la dificultad de contar con datos completos que contemplen la situación de las personas que están al margen del sistema, de modo que distintas organizaciones sociales elevan la cifra entre 30.000 y 37.000 personas.
La vida en la calle afecta de manera decisiva a la salud. La esperanza de vida para las personas sin hogar puede reducirse entre 20 y 30 años, según diferentes estudios. Además, se enfrentan a la aporofobia, término que se define como el odio o rechazo a las personas pobres, y que se puede manifestar a través de actitudes discriminatorias, insultos, agresiones y, en los casos más graves, incluso violaciones y asesinatos. Según el Observatorio HATEnto, de delitos de odio contra las personas sin hogar, el 47% de las personas en situación de sinhogarismo ha sufrido un incidente o delito de odio, y el 81% en más de una ocasión.
Feminización del sinhogarismo
La situación de las mujeres sin hogar merece especial atención porque son invisibles ante la sociedad y ante muchas instituciones. Según datos del Instituto Nacional de Estadística, en 2022 las mujeres representaban el 23,3% de las personas sin hogar en España, un porcentaje que en términos relativos representa un aumento del 47,4% respecto a 2012.
Su invisibilidad se relaciona con diferentes factores. Según Assís Centre d’Acollida, a diferencia de los hombres, las mujeres tienen más capacidad de consolidar redes de apoyo y de movilizar recursos personales y llegan más tarde a vivir situaciones de calle. No obstante, se alojan en viviendas inseguras, inadecuadas o sufren situaciones de explotación laboral, sexual y relaciones de abuso para evitar vivir en la calle. Esta invisibilidad afecta de manera especial a muchas mujeres migrantes, cuya situación administrativa irregular las empuja a trabajar como internas en tareas de cuidados, donde son explotadas a cambio de un techo. De estas realidades prácticamente no se dispone de información, hecho que se suma a la falta de estudios y recursos enfocados a las mujeres sin hogar.
Otra característica distintiva del sinhogarismo femenino es la violencia de género. Según datos de la encuesta del INE sobre personas sin hogar, el 22% de las mujeres que salen de su hogar lo hacen por haber sufrido violencia, ya sea en su propia persona o de sus hijos, y llegan a los recursos de atención tras haber sobrevivido a situaciones de violencia prolongada y experiencias traumáticas.
Las mujeres sin hogar, además, por el mero hecho de ser mujeres, se enfrentan a mayores riesgos y formas de violencia en la calle, que supone un territorio todavía más hostil para ellas. Finalmente, la mayoría de los servicios y recursos de atención para personas sin hogar son mixtos, por lo que las mujeres comparten el espacio con los hombres, hecho que puede reforzar su vulnerabilidad ante la posibilidad de que se reproduzcan patrones de violencia sobre ellas.
Por todo ello, desde Accem apostamos por introducir la perspectiva de género en nuestro modelo de atención a las personas sin hogar, diseñar espacios de acogida y servicios que no solo ofrezcan un refugio temporal, sino que reconozcan y atiendan las necesidades específicas de estas mujeres, facilitando un entorno seguro donde puedan reencontrarse y sanarse.
Conoce nuestros programas específicos para mujeres sin hogar en Valencia y Madrid:
> Medea: Un espacio de respiro en Valencia para mujeres en situación de sinhogarismo
> ‘No Second Night’, el programa de apoyo a mujeres sin hogar en Madrid
“Mi primera noche”
Distintas personas sin hogar comparten sus vivencias y sentimientos y nos hablan de cómo fue la primera noche que tuvieron que enfrentarse a la calle. Relatan sus sensaciones: el miedo, la sensación de fracaso, de inseguridad, tristeza, soledad, etc.
Este vídeo forma parte de una campaña de sensibilización realizada por Accem en Valencia, donde gestionamos el centro de día ‘Blanquita’, que recuerda con su nombre a la primera mujer en situación de sinhogarismo que se conoció en la ciudad.
Distintas personas sin hogar comparten sus vivencias y sentimientos y nos hablan de cómo fue la primera noche que tuvieron que enfrentarse a la calle. Relatan sus sensaciones: el miedo, la sensación de fracaso, de inseguridad, tristeza, soledad, etc.
Este vídeo forma parte de una campaña de sensibilización realizada por Accem en Valencia, donde gestionamos el centro de día ‘Blanquita’, que recuerda con su nombre a la primera mujer en situación de sinhogarismo que se conoció en la ciudad.
Hacemos
Partiendo de la concepción del acceso a una vivienda digna como un derecho para todas las personas y de su papel imprescindible en la conquista de la autonomía, en Accem desarrollamos distintos programas de apoyo destinados a que las personas sin hogar puedan tener la oportunidad de un nuevo comienzo, que les pueda impulsar hacia un proceso integral de recuperación personal y social.
Dadas las numerosas experiencias de rechazo y discriminación que viven las personas sin hogar, hacemos de la relación con el otro nuestra principal herramienta de trabajo, una relación fundamentada en el respeto, la confianza y el compromiso. La intervención se lleva a cabo desde el establecimiento de relaciones significativas con la persona que favorezcan la socialización, la recuperación de habilidades personales, la mejora de su salud, una ocupación del tiempo que favorezca su desarrollo y una mejora de su empleabilidad y autonomía.
Según la Estrategia Nacional para la lucha contra el sinhogarismo en España 2023-2030, tanto en España como en la práctica totalidad de los países europeos la provisión de servicios para personas sin hogar recae casi exclusivamente en el ámbito local, con un papel muy relevante de las ONG. En el caso de Accem, contamos con programas dirigidos directamente a las personas sin hogar, aunque la atención a personas en riesgo de exclusión es transversal en toda nuestra acción. En 2023, atendimos a más de 5.100 personas sin hogar, y de enero a octubre de 2024, a más de 4.200.
Título gráfico: [[
Personas sin hogar atendidas por Accem
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Año | Hombres | Mujeres |
---|---|---|
2023 | 3.988 | 1.139 |
Enero-octubre de 2024 | 3.294 | 928 |
Respecto al perfil de las personas sin hogar atendidas por Accem, el 78% son hombres y el 22% son mujeres, y los principales grupos de edad son de 18 a 34 años (el 58%) y de 35 a 49 años (el 28%). Por nacionalidades, la mayor parte de las personas sin hogar que ha atendido Accem en 2024 son de los siguientes países de origen: Marruecos, Venezuela, Colombia, Argelia, Senegal, Mali, España, Perú y Ucrania.
Fecha gráfico: [[
Principales países de origen de las personas sin hogar atendidas por Accem
]]
País | Personas atendidas |
---|---|
Marruecos | 968 |
Venezuela | 489 |
Colombia | 466 |
Argelia | 398 |
Senegal | 361 |
Mali | 244 |
España | 218 |
Perú | 176 |
Ucrania | 158 |
Atención directa y acogida a personas sin hogar
Tenemos en marcha por una parte programas y dispositivos de intervención en la calle para atender las necesidades más urgentes de las personas en situación de calle y reducir los daños que genera la exclusión social. De esta manera, actuamos para contener situaciones extremas de vulnerabilidad y para propiciar el inicio o mantenimiento de procesos de cambio positivos.
Por otra parte, en nuestros centros de día se proporcionan servicios básicos de información y orientación, apoyo a la higiene (duchas, lavadoras) y alimentación (desayunos, meriendas), consigna para guardar pertenencias o acceso a Internet. También se ofrece atención social, psicológica, sanitaria y jurídica; se realizan talleres formativos y se desarrollan actividades de ocio. Los centros de día de Accem constituyen espacios de relación y socialización de gran ayuda para los procesos de recuperación personal.
Finalmente, contamos con programas de acogida, en ocasiones de carácter temporal que se habilitan durante la temporada invernal, y en otras de carácter permanente. Existen centros de gran capacidad y también pisos con pocas plazas en barrios normalizados de las ciudades en las que estamos presentes, desde los que poder desarrollar una intervención más personalizada y orientada a la reconquista de la autonomía de las personas acogidas, a partir de la promoción de sus propios recursos y capacidades.
En Andalucía gestionamos distintos recursos autonómicos y municipales de acogida y de asistencia en calle a personas sin hogar.
Actualmente, en Almería llevamos a cabo un servicio de atención e intervención a través del cual realizamos acompañamiento y derivación al Centro Municipal de Acogida de aquellas personas que se encuentran en la calle, parques y demás espacios públicos en el municipio.
En Sevilla, Cádiz, Huelva y Almería contamos con el equipo de calle del Proyecto Ulises, que realiza una atención integral enfocada a que las personas sin hogar inicien o mantengan procesos de cambio positivos, a través de un servicio individualizado de atención social y sanitaria en contexto de calle.
En Málaga, contamos con un programa de atención a personas en riesgo de exclusión social que ofrece cobertura en las necesidades básicas, como vivienda y alimentación, además de facilitar y apoyar los procesos de inserción sociolaboral. Además, llevamos a cabo otro programa de atención a personas migrantes, que ofrece un recurso de acogida integral a personas y familias que se encuentran sin hogar.
Finalmente, en Sevilla, Jerez y Córdoba ofrecemos dispositivos de acogida a través de los cuales ofrecemos un recurso de alojamiento con un mayor periodo de estancia que el ofrecido por los albergues municipales u otros recursos de pernocta, ofrecemos atención a necesidades básicas y contamos con un dispositivo de acogida de personas inmigrantes en situación de vulnerabilidad.
Dentro del ámbito de actuación con las personas sin hogar, en Asturias contamos con el proyecto SPERO, Servicio de Atención y Acompañamiento Sociosanitario a personas en situación de riesgo y/o exclusión social.
Este recurso, que forma parte de los recursos de la Red de Inclusión Activa del Ayuntamiento de Gijón y del Grupo de Trabajo Sin Hogar del Ayuntamiento de Oviedo, está orientado a ofrecer atención y acompañamiento sociosanitario a personas convalecientes tras el alta hospitalaria que se encuentran en situaciones de riesgo y/o de exclusión social, principalmente personas sin hogar.
El servicio se desarrolla en una vivienda de 6 plazas ubicada en Gijón dentro de un entorno comunitario.
En Albacete llevamos a cabo el programa “Apoyo integral para personas sin alojamiento digno y en riesgo de exclusión social”, de atención en calle a personas en situaciones de grave dificultad social, especialmente afectadas por problemas relacionados con el acceso a una vivienda. Se intenta dar cobertura tanto a necesidades básicas, como de información, asesoramiento, orientación y acompañamiento en las diferentes áreas de la persona, sociofamiliar, emocional, educativa, laboral, sanitaria y de vivienda.
También en Albacete, desarrollamos el programa “Empoderamiento familiar para una vida autónoma”, cuyo objetivo principal es realizar un apoyo y acompañamiento que favorezca la plena autonomía de las familias que se encuentren en situación de dificultad social y/o exclusión, fortaleciendo las áreas necesarias para que tengan una buena integración social en la ciudad de acogida.
En la Comunitat Valenciana actualmente tenemos en funcionamiento el centro de día “Blanquita”, en Valencia, un centro dirigido a personas en situación de sin hogar, con una media de 50 personas atendidas al día, que reciben servicios básicos de apoyo y una intervención a nivel psicosocial orientada a la reducción de daños y al fomento de la participación. Este centro abre un día a la semana de manera exclusiva para mujeres que se encuentran en situación de sin hogar.
En la misma línea, también estamos desarrollando en Valencia el programa “Medea”, centro de día en fines de semana y festivos exclusivamente dirigido a mujeres en situación de sinhogarismo, con el objetivo de ofrecerles un espacio seguro en condiciones adecuadas para el descanso y el cuidado personal, que ayude a paliar el deterioro socio-sanitario asociado a la situación de sinhogarismo. “Medea” atiende una media de 20 mujeres al día, aunque este número puede variar entre 16 y 22, según la jornada.
Por otra parte, a través del programa “Ni una nit més” ofrecemos un alojamiento transitorio no institucionalizado a mujeres en situación de sinhogarismo o en riesgo de estarlo. Este programa ha dado cobertura a las necesidades básicas y ha ofrecido acompañamiento especializado a 128 mujeres entre enero y octubre de 2024.
Finalmente, en la Comunitat Valenciana, Accem cuenta con diez viviendas de acogida temporal para personas que se encuentran en situación de sinhogarismo, en el marco del dispositivo de acción concertada de la Generalitat Valenciana. Seis de ellas están ubicadas en Valencia, dos en Alicante y dos en Castellón. Siete de ellas están específicamente dirigidas a jóvenes migrantes, dos a mujeres y una a personas en situación de sinhogarismo de larga duración. En total, se dispone de 58 plazas de acogida concertadas (33 en Valencia, 12 en Alicante y 13 en Castellón). Con este proyecto, además de proporcionar una respuesta habitacional, se trabaja de manera integral para posibilitar el inicio de itinerarios de inserción que permitan alternativas al sinhogarismo.
En A Coruña contamos con el centro de atención “Acouga”, un dispositivo de frío durante los meses de invierno y de primavera, además de los programas de apoyo a la inclusión básica y de atención en calle y provisión de recursos básicos.
A través del centro de atención social “Acouga”, con su servicio de calor café, y el resto de programas de acción social, se ofrece apoyo a la cobertura de necesidades básicas, respuesta a situaciones de necesidad urgentes y sobrevenidas, y atención y acompañamiento social para personas sin hogar. Este punto de calor es un espacio de reposo y socialización donde las personas pueden disponer de servicio de desayuno, recogida de kits de alimentación, consigna y material de aseo e higiene, entre otras prestaciones. Desde una perspectiva de baja exigencia, se ha creado un entorno de seguridad y confianza desde el que trabajar en los vínculos sociales y en el inicio o continuidad de procesos de cambio.
Por otra parte, y con motivo del dispositivo de frío que se pone en marcha durante la temporada invernal, desde Accem articulamos un equipo de atención en calle, bajo la supervisión y coordinación del Equipo Municipal de Inclusión Social (EMIS).
Finalmente, contamos con un programa dirigido a mejorar la calidad de vida de las personas con problemas de salud mental que se encuentran en situación de exclusión social severa, especialmente personas en situación de sinhogarismo.
En la Comunidad de Madrid, desde 2021, llevamos a cabo el programa “No Second Night”, que facilita alojamiento temporal de respuesta inmediata a mujeres que acaban de quedarse sin el cobijo de un techo y permite establecer una red que las sostiene, garantiza su integridad física y previene procesos de mayor deterioro.
Este programa, financiado por el Ayuntamiento de Madrid, también garantiza la protección social, mediante prestaciones básicas, y facilita la vinculación a otras redes de protección social para posibilitar el regreso de las mujeres a recursos habitacionales a los que puedan acceder de forma autónoma. Dentro de este programa, gestionamos 53 plazas de acogida.
En Monteagudo, ofrecemos un servicio de atención integral a personas inmigrantes en albergues de acogida. Este dispositivo permite atender de forma temporal las necesidades de alojamiento y manutención de personas inmigrantes que se encuentran en una situación de exclusión residencial, a la vez que se promueve el desarrollo de su inserción y capacidades sociales de cara a su autonomía.
Finalmente, en Murcia y Archena, gestionamos ayudas al alquiler, en coordinación con los Servicios Sociales de atención primaria, para facilitar el acceso inmediato a la vivienda a personas víctimas de violencia de género y otros colectivos especialmente vulnerables.