Más de 100 personas fueron penalizadas en Europa por asistir a personas migrantes en 2023
Rescatar o ayudar a personas migrantes en peligro en el mar; proporcionar refugio; promover políticas inclusivas a nivel local; tratar de detener una deportación; o proporcionar a las personas migrantes comida, agua y ropa. Estos ejemplos han sido citados por la Plataforma para la Cooperación Internacional sobre Migrantes Indocumentados (PICUM) como casos reales de actos tipificados como delito en algunos países de la Unión Europea a lo largo de 2023.
PICUM, plataforma de la que Accem forma parte, ha publicado recientemente los resultados de una investigación sobre la persecución de personas que se han tenido que enfrentar a procesos judiciales en la Unión Europea por haber ayudado a personas migrantes bajo conceptos como los señalados anteriormente. Como señala esta plataforma, “el derecho penal y otros enfoques basados en sanciones se utilizan a menudo para castigar a las personas migrantes y a quienes les prestan asistencia”, lo cual se define como criminalización.
El informe, que se titula “Casos de criminalización de la migración y la solidaridad en la UE en 2023”, muestra que a lo largo del año pasado hubo un total de 117 personas acusadas por haber colaborado con la entrada, la estancia o el tránsito de personas migrantes. En 2023, casi el 60% de los casos estuvieron relacionados con la asistencia a personas migrantes en tierra, y aproximadamente el 40% en el mar.
Desde PICUM señalan que en 2023 hubo más casos reportados que en 2022 y 2021, por lo cual confirman una tendencia preocupante y constante observada en informes anteriores. Los datos de PICUM se extraen de un monitoreo de informaciones publicadas por distintos medios de comunicación, por lo cual se consideran una aproximación a la realidad y no un reflejo real del total de casos de persecución en la UE, pues muchos casos no son reportados por los medios o porque la gente teme represalias, especialmente las personas migrantes.
Desde PICUM añaden que la legislación contra el tráfico de personas criminaliza la solidaridad, pero también el propio acto de migrar. De hecho, en 2023, al menos 76 personas migrantes en Italia, Grecia y España fueron perseguidas por el hecho de cruzar fronteras de forma irregular. Esta persecución afecta también a la infancia y la juventud, pues al menos siete de las personas penalizadas en 2023 eran menores de edad en el momento de los hechos.
Por otro lado, el seguimiento de los medios de comunicación recogido en el informe de PICUM indica la existencia de 15 casos de acoso extrajudicial, que afectaron a 17 personas y 12 ONG. En un tercio de los casos, la persona/organización en cuestión recibió una multa administrativa por sus acciones de apoyo a los inmigrantes. Otras formas no judiciales de acoso incluían la confiscación de material, el acoso policial, la detención, las amenazas de grupos privados o la difamación.
Los aspectos más destacados del informe incluyen:
- Distribución geográfica: Se han registrado casos en al menos 8 países de la UE, la mayoría en países del sur de Europa, en particular Italia y Grecia.
- Tipos de solidaridad: Las personas enfrentaron repercusiones legales por diversos actos de solidaridad, incluido proporcionar refugio y necesidades básicas a los migrantes, abogar por políticas inclusivas y tratar de detener una deportación.
- Procedimientos legales prolongados: En promedio, los procedimientos legales duraron 3,5 años, y algunos casos se prolongaron incluso más.
- Criminalización de la infancia en la migración: Al menos siete menores de edad enfrentaron procesos judiciales y encarcelamiento como presuntos “conductores de embarcaciones”.
- Acoso extrajudicial: Se registraron al menos 15 casos, que afectaban a 17 personas y 12 ONG, además de los 117 casos registrados.
>Accede aquí al informe completo (disponible en inglés)