Se alcanza la cifra de 38 millones de desplazados en el mundo dentro de sus países
El Observatorio de Desplazamiento Interno (IDMC) ha dado a conocer esta semana que, según sus datos, en el mundo hay hasta 38 millones de personas desplazadas de sus hogares dentro de las fronteras de su país por razones de guerra, violencia o persecución.
Esta cifra de 38 millones de desplazados, que incluye 11 millones de nuevos desplazados durante 2014, supone un dramático record.
Así lo recoge el IDMC, organismo dependiente del Consejo Noruego para los Refugiados (NRC), que ha presentado esta semana su “Estudio global 2015: personas desplazadas internamente por los conflictos y violencia”.
El mayor de los desplazamientos internos de personas en 2014 se vivió en Iraq, con alrededor de 2,2 millones de personas forzadas a abandonar sus hogares.
El 60% de los nuevos desplazamientos observados en 2014 se produjeron en cinco países: Iraq, Sudán del Sur, Siria, la República Democrática del Congo (RDC) y Nigeria.
La guerra ha provocado que el 40% de la población de Siria se haya convertido en desplazada, en una cifra total que alcanza los 7,6 millones de personas, la más alta del mundo.
2014 fue también el año en el que dentro de Europa se originó un conflicto que está provocando el desplazamiento forzoso de personas. La guerra en Ucrania obligó a 645.000 personas a huir de sus casas durante el año.
En la presentación del informe en Ginebra (Suiza), Jan Egeland, secretario general del NRC, afirmaba: “Se trata de las peores cifras de desplazamiento forzado en una generación y demuestran nuestro completo fracaso en la protección de civiles inocentes”.
Por su parte, Volker Türk, Asistente del Alto Comisionado para la Protección de ACNUR, advertía de las consecuencias: “Sabemos que cada vez más y más desplazados internos se están viendo obligados a trasladarse dentro de su propio país en múltiples ocasiones. Mientras más tiempo dure un conflicto, más inseguros se sentirán y, cuando les invada la desesperación, muchos cruzarán fronteras y se convertirán en refugiados”.
Y añadió Türk: “Como hemos podido comprobar recientemente, en el Mediterráneo, la desesperación lleva a miles de personas a correr riesgos e incluso a embarcarse en peligrosos viajes por mar. La solución más evidente consiste en realizar un esfuerzo sin precedentes para llevar la paz a los países devastados por la guerra”.
Fuente: ACNUR España