“Made in L.A.”: Mujeres migrantes, latinas y en pie

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“Made in L.A.” («Hecho en Los Ángeles») es una película documental que narra la historia y la lucha de tres mujeres latinas, trabajadoras en condiciones de explotación en talleres textiles de Los Ángeles, California.

Las tres protagonistas, Lupe, María y Maura, llegaron a Estados Unidos como migrantes, para trabajar, sacar adelante a sus familias y a ellas mismas, y encontrar un futuro mejor.

Arribaron a Los Ángeles y acabaron trabajando como costureras para una famosa marca de ropa, en condiciones muy precarias. Decidieron embarcarse en una lucha desigual para mejorar su situación en el trabajo, y en ese proceso, conocieron el valor de la unidad, y de la fuerza que proporciona. Tres años después de comenzar este proceso de lucha se dieron cuenta de que su vida había cambiado, de que su experiencia las había transformado.

Lupe Hernández dejó su México natal a los 17 años y lleva más de 15 años trabajando en la industria textil.

Maura Colorado conoció la amargura de tener que dejar a sus tres hijos en El Salvador al cuidado de sus padres para poder mantenerles con su trabajo en Los Ángeles. Conoció la realidad de los salarios de miseria en las fábricas, y la realidad de ser una “indocumentada” le castigó con 18 años sin poder abrazar a sus hijos.

María Pineda dejó México a los 18 y acumula ya 23 años de explotación en California, viviendo en sus carnes las dificultades de ser mujer, latina, migrante, trabajadora y madre en los Estados Unidos de América.

Ellas dan vida, voz, color y calor a una historia en la que otras muchas son protagonistas.

En el Centro de Trabajadores de la Costura de Los Ángeles se juntan, como otros muchos en su misma situación. Desde allí se atrevieron a lanzar una campaña de boicot y denuncia contra una de las compañías del sector más poderosas de la ciudad. Tres años duró esa experiencia, llenos de esperanzas y desalientos, de decepciones, de ilusión y perseverancia.

Y en ese proceso dejaron de ser víctimas para renacer con su dignidad renovada, un camino de no retorno y sin fin. Un camino que obliga siempre a volver a levantarse, después de volver a caer.

La directora de esta película documental es Almudena Carracedo, española, licenciada en Ciencias de la Imagen por la Universidad Complutense de Madrid, que marchó a Estados Unidos a realizar su tesis doctoral en la Escuela de Cine de UCLA.

Esta película, que comenzó como proyecto como un cortometraje dedicado a las condiciones laborales de las migrantes latinas en las fábricas de Los Ángeles, acabó alargándose en su proceso de creación, gestación y acompañamiento por cinco años, para convertirse en “un retrato mucho más íntimo y más profundo de una experiencia cada vez más universal en la sociedad globalizada de hoy en día: la lucha de muchos inmigrantes recientes para comenzar una nueva vida, para aprender sus derechos y proclamar su voz en nuestras sociedades”, en palabras de la directora.

“Made in L.A.” se estrenó en junio de 2007 en el Festival de Documentales Silverdocs, a las afueras de Washington D.C. Una semana después se estrenaba en la costa oeste de los EE.UU., en el Festival de Cine de Los Ángeles. Desde entonces, no ha parado, ha recorrido el mundo recogiendo reconocimientos, simpatías, afinidades, lágrimas de emoción y de identificación con la universal historia que cuenta.

Se ha mostrado en más de 80 festivales de todo el mundo, y ha conseguido numerosos premios, entre los que se pueden destacar un Premio Emmy 2008, y una Mención Especial del Jurado en la Semana Internacional de Cine de Valladolid (SEMINCI) en 2008.

Las palabras de Lupe: “Cuanto más aprendo, más sola me siento. La ignorancia en algunas formas te protege. Pero después digo: ya que estás aquí, lo cansado y lo bailado ya nadie te lo puede quitar”.

Maura pudo volver a El Salvador y reencontrarse con sus hijos, tantos años después. Su emoción se desató cuando vio a su hijo mayor llorar al ver la película y “fue capaz de entender las situaciones que tuve que vivir y por qué tuve que dejar El Salvador para venir a trabajar aquí”.

María afirma que cuando ve la película se siente muy triste por lo que tuvo que soportar. “A la vez me hace sentir bien que otras personas puedan ver que es posible, que uno puede avanzar si lo desea. Sólo abre los ojos y sé fuerte”.

Ellas no son actrices profesionales. Ellas son las verdaderas protagonistas de su historia. Ellas han de seguir trabajando día a día para salir adelante. Ellas siempre serán inmigrantes en los Estados Unidos.

Freddie es uno de los hijos de María. “La película es buena porque al final todo termina como debía terminar para ellas, como mujeres, como trabajadoras y como inmigrantes. Pero siendo hijo de inmigrantes me siento triste al ver como todos los desprecian y los tratan como si ellos tuvieran menos derechos que los demás. Mis padres nunca pudieron quejarse de nada porque, como inmigrantes, siempre tuvieron miedo a ser deportados. Pero creo que debemos luchar. Como dicen en la película: Unidos, podemos”.

Para saber más de “Made in L.A.”, no duden en visitar: http://www.madeinla.com/

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