La crisis de refugiados sirios y los Estados el golfo Pérsico

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En las últimas semanas, varios artículos de periódicos de la prensa internacional como Al Jaazera y el Washington Post, y una entrevista realizada a Sherif Elsayid-Ali, Responsable de Migraciones y Asilo en Amnesty International, han puesto de relieve la ausente respuesta de los países del golfo pérsico en la acogida de refugiados sirios, y analizado las posibles causas de dicha actitud. Dada la proximidad geográfica, así como los increíbles recursos a disposición, Arabia Saudita y los Estados árabes a lo largo del Golfo podrían jugar un papel muy importante en la gestión y acogida de los 6 millones de refugiados que actualmente han huido de Siria.

No obstante, los seis países del golfo que forman parte del Consejo de Cooperación para los Estados Árabes del Golfo (GCC), Bahréin, Kuwait, Omán, Qatar, Arabia Saudita, y los Emiratos Árabes Unidos, no están jugando ningún papel en la acogida de los refugiados sirios. Al contrario, estos países han puesto la responsabilidad principalmente en los países de Líbano, Turquía, y Jordania creando mucha tensión a nivel internacional. De los 4 millones de personas que han huido de Siria, oficialmente ninguno ha sido acogido en los países mencionados. Sí han sido generosos económicamente, pero desde el punto de vista de la acogida humanitaria, su rol ha sido nulo. La mayoría de los refugiados de Siria han sido acogidos en países del Medio Oriente: según la ONU alrededor de 1.9 millones de sirios vive en campamentos de refugiados turcos, 1.1 millón en Líbano, 629.000 en Jordania, 249.000 en el norte de Irak y Egipto unos 132.000.

Ninguno de los países son firmantes de la Convención de Refugiados de 1951 de Naciones Unidas, que define quien es un refugiado y establece sus derechos, así como las obligaciones de los Estados para salvaguardarlos. Por esta razón, los refugiados no tienen derechos reconocidos. Según Acnur, hay aproximadamente 500.000 sirios que viven en Arabia Saudita, aunque no se clasifican como beneficiarios de protección internacional y no está claro cuando fue la llegada de la mayoría de ellos al país. Por esta razón, muchos de los que entraron en los países del CCG desde Siria con un permiso de trabajo o una visa de turista, han podido permanecer en los países tras caducar sus permisos, pero sin pleno acceso a sus derechos legales.

En los países del golfo, la inmigración es de carácter temporal. Al no saber por cuánto tiempo los refugiados pueden llegar a quedarse, y por eso prefieren no acogerles. Además, como los países de Europa, Arabia Saudita y sus vecinos también alegan tener temores acerca de que los refugiados quiten puestos de trabajo a sus ciudadanos e invocan preocupaciones relativas a la seguridad y a la amenaza terrorista. Debido a estos elementos políticos y económicos, los países del golfo seguirán sin jugar un rol en la acogida de sirios.

Para ayudar a las persona refugiadas, el ACNUR está tratando de aumentar la financiación para los centros de acogida. Además, en los países del golfo a algunas de las personas refugiadas particulares les será dado acceso a educación y seguro médico. La organización además está intentando concienciar a la sociedad civil y a las autoridades para que se realicen los cambios legislativos y políticos necesarios para mejorar la situación de los refugiados en el medio oeste y en los países del golfo.

Cabe finalmente destacar como, otros países de altos ingresos, como Rusia, Japón, Singapur y Corea del Sur, tampoco han ofrecido ninguna plaza de reasentamiento.

Accede aquí al articulo del Washington Post sobre el tema >>

Accede aquí al articulo de Al Jazeera sobre el tema >>

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