Reflejo del año 2023: la atención a mujeres en cifras por Accem

En el transcurso del 2023, Accem ha atendido a 26.867 mujeres, continuando su labor de asistencia a mujeres en situación de vulnerabilidad y proporcionando un soporte vital frente a los múltiples desafíos que enfrentan. Este artículo desglosa los datos esenciales sobre las atenciones realizadas, ofreciendo una fotografía clara de la diversidad de situaciones de las mujeres atendidas por la entidad. Las cifras que se presentan reflejan la labor que se realiza desde la organización brindando apoyo, protección y recursos a mujeres que buscan un refugio seguro y una vida libre de violencia y discriminación.

Las mujeres atendidas por Accem en 2023 presentan una amplia diversidad en cuanto a su situación administrativa lo cual habla de la variedad de contextos desde los cuales se solicita apoyo:

El 20 % de las mujeres atendidas por Accem son beneficiarias de protección internacional: un total de 5.256 mujeres que incluye tanto a refugiadas, como a aquellas bajo la figura de protección subsidiaria o protección temporal.

El 33 % son solicitantes de protección internacional: 8.815 del total de las más de 25.000 están en proceso de solicitar asilo.

Un 31 % del total son inmigrantes: 8.328 mujeres inmigrantes han sido atendidas por Accem el pasado año.

4.367 mujeres de nacionalidad española fueron atendidas por Accem, alcanzando el 16 % de las atenciones a mujeres realizadas en el 2023.

 

Las principales nacionalidades entre las mujeres atendidas durante el pasado año fueron las siguientes: el 21 % de las atenciones fueron a mujeres de nacionalidad ucraniana, el 16,3 % colombiana, el 16 % española, el 13,4 % venezolana, el 8,6 % marroquí y el 6 % peruana.

Gráfico de mujeres atendidas según nacionalidad

Vulnerabilidad y edad

En cuanto a factores de vulnerabilidad relacionados con el género se han identificado principalmente los siguientes: familias monomarentales con hijos menores, víctimas de violencia de género y mujeres embarazadas. 

En cuanto al rango de edades entre las mujeres atendidas se presentan los siguientes datos: menores de edad (16,9 %), 18-34 años (30,6 %), 35-64 años (40,4 %) y mayores de 64 años (12,12 %). 

 

Solicitantes de asilo

Los principales motivos por los cuales las mujeres solicitan protección internacional incluyen conflicto generalizado en su país de origen, opiniones políticas, y cuestiones de género. Además de los motivos generalizados, este último aspecto resalta la particular vulnerabilidad que sufren las mujeres ante situaciones de violencia y discriminación basadas en el hecho de ser mujer.

Un compromiso con el cambio

La labor de Accem en 2023 es un testimonio del compromiso con la defensa de los derechos y el bienestar de las mujeres. A través de una atención personalizada, equipos de profesionales multidisciplinares y programas específicos, nos esforzamos por empoderar a las mujeres y acompañarlas en su camino hacia una vida libre de violencias y segura.

Invitamos a la comunidad a conocer más sobre nuestros esfuerzos y a unirse a nosotros en esta causa fundamental. La solidaridad y el apoyo son esenciales para construir un futuro en el que todas las mujeres puedan vivir libres de violencia y discriminación.

> Conoce nuestro Atlas de Refugio 8M 2024

 

Refugiadas ucranianas retornan al país para ponerse al frente de los cuidados familiares

Ahora que se han cumplido dos años del inicio de la guerra en Ucrania y nos acercamos a la celebración del 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, desde Accem ponemos nuestra atención en algunas historias de retorno voluntario de mujeres ucranianas, beneficiarias de protección temporal en España, que en los últimos meses han regresado a su país para atender distintas situaciones y necesidades familiares. Sin perder de vista el hecho de que retornar al país es un derecho fundamental, desde Accem ponemos el foco en algunas historias de mujeres refugiadas que, a pesar del peligro que supone, han decidido volver a Ucrania por motivos familiares y de cuidados. 

Se trata de historias marcadas por la necesidad de atender a familiares en situación de dependencia, que también narran el estrés emocional que supone sostener los vínculos afectivos en la distancia. Se observa en estas historias el deseo y la necesidad de poner los cuidados familiares en el centro, a pesar de que eso suponga renunciar a la protección temporal y regresar a un país donde la guerra inicia su tercer año en curso. 

Iryna Tyvanyuk, de 53 años, regresó a su ciudad de origen, Rivne, para atender a su padre, de 88 años. Huyó de Ucrania con dos hijos menores a cargo al poco tiempo de comenzar la guerra y la familia acabó instalándose en Valencia. En Rivne quedaron, entre otros familiares, sus padres, con distintas necesidades de atención y cuidados. La madre de Iryna falleció en junio de 2023 y fue entonces cuando Iryna decidió regresar a Ucrania para asumir los cuidados de su padre. Volver a casa ha sido una decisión no exenta de riesgo, según comenta, pues casi todos los días suenan las sirenas y la población acude a los refugios. “Si estamos en casa, salimos al pasillo y nos sentamos en sillas. Da miedo cuando vuelan cohetes y drones. Es peligroso en todas partes de Ucrania”, cuenta Iryna.

Desde que comenzó la guerra, en febrero de 2022, en Accem hemos atendido a un total de 35.050 personas procedentes de Ucrania, el 63% de ellas mujeres y la mayoría con menores a cargo. Muchas de estas familias han expresado en muchas ocasiones su deseo de regresar a Ucrania en cuanto la situación del conflicto bélico lo permitiese. Este sentimiento ha quedado reflejado en una encuesta realizada por ACNUR sobre intenciones y perspectivas de las personas refugiadas de Ucrania, donde un 65% han manifestado su deseo de volver a casa tan pronto como sea posible. 

En el caso de muchas mujeres, el deseo de volver a casa también nace de la necesidad de superar el elevado estrés que supone la separación familiar prolongada. Es el caso de Natalia, de 48 años, que ha regresado a Odessa, una ciudad donde los bombardeos continúan a diario y donde los proyectiles caen sobre edificios residenciales mientras la población busca seguridad en los refugios antiaéreos cuando suenan las alarmas. “En 2022, cuando comenzó la guerra, mi hija y yo decidimos abandonar el país. Mi marido se quedó para trabajar y defender Ucrania”. Inicialmente alquilaron un piso, pero el dinero ahorrado comenzó a escasear para cubrir las necesidades básicas y entonces recurrieron a Accem. “Cada día leíamos las noticias y llamaba a mi marido. Fue muy difícil para nuestra familia estar separados. España es un gran país para pasar unas vacaciones, pero todos los días estábamos en Ucrania con el alma y contábamos los días para regresar. La situación actual da miedo, pero estamos en casa”, concluye. 

Historias como las de Natalia e Iryna presentan muchas cosas en común con los más de cien casos identificados por los equipos profesionales de Accem en las fases de Acogida y de Valoración Inicial y Derivación que se pueden describir como retornos voluntarios por motivos de cuidados familiares. Entre las historias recogidas por el personal de Accem destacan casos como el de una mujer que ha retornado para atender a un sobrino con autismo; otra mujer mayor que ha regresado para el cuidado de sus nietos; una mujer y su hijo menor de edad que han vuelto para atender a una tía mayor que carece de otras redes de apoyo; y otra mujer, con cuatro menores a cargo, que ha regresado para cuidar a su hermana en coma tras sufrir un accidente de tráfico. Así, hasta 106 casos que se han podido identificar como retornos voluntarios por razones relacionadas con los cuidados y los vínculos familiares. 

Con todo, estos retornos forman parte del cómputo global de más de 4,5 millones de personas que según la Organización Internacional para las Migraciones han regresado a sus hogares pese a la situación general de incertidumbre e inseguridad que supone la continuidad de la guerra en Ucrania. En este escenario, la vida y los cuidados se sostienen, con las mujeres al frente.

> Para saber más sobre la respuesta de Accem a las personas refugiadas por la guerra en Ucrania, pincha aquí. 

> Dos años de guerra en Ucrania: Accem atendió a más de 9.500 personas refugiadas en 2023

> Mujer con estudios superiores e hijos a cargo: así es el perfil mayoritario de las personas de Ucrania que llegan huyendo de la guerra

Datos de Protección Internacional 2023: 11.163 personas consiguieron protección en España en el último año

A lo largo de 2023, el Estado español ha otorgado el estatuto de refugiado a 7.330 personas. También ha reconocido el derecho a la protección subsidiaria a 3.833 personas, lo que resulta en un total de 11.163 beneficiarios que han alcanzado las dos principales figuras de protección internacional que existen. Esta cifra representa un descenso en los datos en comparación con las 14.235 personas que se beneficiaron de estas dos figuras en 2022.

 

TOTAL DE DE PERSONAS BENEFICIARIAS DE LAS FIGURAS DE PROTECCIÓN INTERNACIONAL

 

Las nacionalidades que encabezaron este 2023 la lista de solicitudes, según los datos que ha hecho públicos el Ministerio del Interior, han sido Venezuela, Colombia y Perú, con 37,09 %, 32,82 % y 8,77 % respectivamente, del total de 163.220 solicitudes. Por tanto siguen predominando las nacionalidades latinoamericanas como solicitantes de protección internacional, siendo el 78,68 % del total las correspondientes a estos tres países de América Latina.

 

NACIONALIDADES QUE ENCABEZAN LA LISTA DE SOLICITUDES DE PROTECCIÓN INTERNACIONAL

 

Por otro lado, al igual que en el primer semestre de 2023, Mali sigue siendo el país que más resoluciones favorables obtiene, con 2.362 personas que han tenido acceso a protección internacional, un 21,16 % del total de las personas a las que se le ha reconocido esta figura. Tras Mali se sitúa Afganistán, con un 10,03 %, y Siria, con un 9,42 %. En estos datos no se incluye a las personas beneficiarias de la figura de protección temporal, que se aplica a las personas refugiadas procedentes de Ucrania, debido a la guerra que lleva produciéndose dos años en el país eslavo. 

 

PAISES QUE MÁS RESOLUCIONES FAVORABLES OBTIENEN

 

En cuanto a la tasa de reconocimiento del estatuto de Protección Internacional, los ciudadanos ucranianos y de la República Centroafricana tuvieron las tasas más altas de reconocimiento, con un 98,87 % y un 96,55 % respectivamente.

También hay 41.487 personas que, aun no habiendo obtenido el reconocimiento del estatuto de protección internacional, se les ha concedido la autorización de residencia por razones humanitarias, siendo 40.674 procedentes de Venezuela, el 98,04 % del total de los permisos otorgados por esta razón.

 

AUTORIZACIÓN DE RESIDENCIA POR RAZONES HUMANITARIAS

 

Cabe destacar también, según los datos del informe del Ministerio del Interior, que se denegaron 35.392 solicitudes de protección durante este pasado 2023, siendo la nacionalidad colombiana la más afectada, seguida de la de Marruecos y Perú.

Dividiendo los datos que se han hecho públicos por género y edad encontramos que un 52.50 % de los solicitantes fueron hombres y un 47,50 % mujeres. La mayoría de personas que solicitan protección internacional son jóvenes entre 18 y 34 años, en concreto son un 48.65 % de todas las solicitudes. El porcentaje de personas solicitantes de protección internacional que son menores de edad ascienden al 18,30 %.

 

SOLICITUDES DE PROTECCIÓN INTERNACIONAL POR GÉNERO Y EDAD

 

Dos años de guerra en Ucrania: Accem atendió a más de 9.500 personas refugiadas en 2023

A dos años del inicio de la guerra a gran escala en Ucrania, Accem continúa atendiendo a las personas desplazadas forzosamente, superando los desafíos que conlleva atender un conflicto que se prolonga en el tiempo y que, según datos de ACNUR, ocasiona a día de hoy más de 6,4 millones de personas refugiadas que han tenido que abandonar el país y más de 3,5 millones de desplazados internos. 

En el año 2023 hemos atendido a más de 9.500 personas, reflejando el compromiso constante con las necesidades emergentes de los afectados por la guerra. Esta cifra, que contrasta con las 29,056 personas atendidas en el primer año del conflicto, se debe a las cambiantes dinámicas de la guerra y necesidades de los desplazados. 

De las 9.500 personas desplazadas por el conflicto atendidas durante este último año, 3.871 son hombres y 5.629 mujeres. Continúa, por tanto, la prevalencia de mujeres desplazadas debido, en parte, a mayores dificultades para salir del país de los hombres en edad militar. El grupo de edad de desplazados más significativo en 2023 ha sido el de 35 a 64 años, con 3.818 personas atendidas, seguido de cerca por los jóvenes entre 18 y 34 años, con 2.554 individuos. 

La organización ha asistido el pasado 2023 a 2,253 personas en la fase de valoración inicial y derivación, y a 2.086 en la fase de acogida. Actualmente, 256 personas están siendo asistidas en la fase de valoración inicial y derivación y 405 en fase de acogida, en la que se proporciona una atención integral enfocada desde el primer momento a favorecer el proceso de inserción social y en la conquista de la autonomía. 

En el contexto de estos dos años de atención a los desplazados por la guerra, es importante reconocer el alcance del trabajo acumulado. Desde el comienzo del conflicto hasta ahora, Accem ha brindado apoyo a 35.050 personas desplazadas, de las más de 190.000 que se han refugiado en España desde que escaló la guerra, un esfuerzo que abarca tanto la atención inmediata como la asistencia sostenida. Este total refleja la dedicación y capacidad de esta organización para responder a una emergencia humanitaria compleja y en constante evolución.

Tras dos años de conflicto a gran escala que no muestra señales de resolución inmediata, Accem no solo se ha enfrentado a los retos apremiantes, sino que también ha puesto la mirada en el futuro. El esfuerzo realizado por ofrecer un apoyo que vaya más allá de atender a las necesidades básicas de los refugiados busca la necesaria integración efectiva de las personas desplazadas en la sociedad. Esto resalta la importancia de una respuesta ante los conflictos que sea tanto oportuna como sostenida en el tiempo. Por ello, Accem continúa y continuará trabajando en su misión de apoyar a aquellos cuyas vidas han sido alteradas, asegurando que cada persona refugiada reciba la ayuda necesaria para reconstruir su vida en un entorno seguro y acogedor.

> Para saber más sobre la respuesta de Accem a las personas refugiadas por la guerra en Ucrania, pincha aquí. 

La mutilación genital femenina, una forma de violencia contra las mujeres que puede ser motivo de protección internacional

Hoy, 6 de febrero, se conmemora el Día Internacional de Tolerancia Cero con la Mutilación Genital Femenina (MGF), una jornada para visibilizar esta forma de violencia contra las mujeres y contra la infancia que comprende, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la escisión total o parcial de los órganos genitales femeninos o cualquier otra lesión en los mismos por motivos no médicos. 

La MGF es aceptada socialmente en muchos países, regiones y comunidades del mundo. Según Naciones Unidas, es frecuente en diferentes regiones de África (occidental, oriental y nororiental), así como en algunos países de Oriente Medio y Asia. No obstante, en un mundo conectado a través de los movimientos migratorios, lo que un día fue local ahora es global y la MGF no es una excepción, es una realidad presente también en países europeos, Estados Unidos o Canadá y, aunque conocer el número exacto de afectadas resulta complejo, UNICEF estima que más de 200 millones de mujeres y niñas han sido víctimas de la MGF en una treintena de países del mundo y que, cada año, cerca de cuatro millones de niñas se enfrentan al riesgo de sufrirla.

La Mutilación Genital Femenina viola los derechos humanos de las mujeres y las niñas y atenta contra su salud y su integridad, ya que no solo puede provocar la muerte de quien la sufre, sino que puede causar complicaciones de salud tanto a corto como a largo plazo, desde hemorragias e infecciones hasta infertilidad, problemas menstruales y sexuales y trastornos psicológicos, entre otros.

Mutilación genital femenina y necesidad de protección internacional

Haber sufrido o tener riesgo de sufrir la mutilación genital femenina evidencia una forma de violencia de género que crea diferentes realidades y justifica la solicitud de protección internacional por varios motivos: desde mujeres que escapan de sus países de origen para evitar que se les realice la MGF tanto a ellas como a sus hijas hasta mujeres que ya la sufrieron y han tenido que padecer lesiones y secuelas que impiden que puedan permanecer en sus países de origen. Pero también a la inversa, hijas de personas migrantes que, aún naciendo en el país de acogida, corren el riesgo de ser llevadas al país de origen de su familia para que se les practique la MGF, un supuesto que la protección internacional impide. 

No obstante, si hablamos de mujer y refugio, la Mutilación Genital Femenina no es la única causa de solicitud de asilo por motivos de género, es común que una misma mujer haya sufrido diferentes formas de violencia y persecución, como el matrimonio forzado, la persecución de la diversidad sexual, la violencia física y sexual y la trata.

Por todo ello, desde Accem compartimos la lucha de las Naciones Unidas para la eliminación plena de la MFG para 2030, siguiendo el espíritu del Objetivo de Desarrollo Sostenible 5, y promovemos y facilitamos procesos de integración social que favorezcan la erradicación de formas de violencia como la MGF, desde la sensibilización, el respeto y salvaguarda de los derechos humanos.

> Visita nuestra web de Mujeres Refugiadas y conoce los motivos específicos de persecución por género.

Accem acogió en 2023 a 89 personas refugiadas a través del Programa Nacional de Reasentamiento

A lo largo de 2023, Accem recibió y acogió a un total de 89 personas refugiadas a través del Programa Nacional de Reasentamiento (PNR). Las personas que fueron acogidas por Accem a través de esta vía llegaron a España en un total de once grupos diferentes. Hasta un total de 83 personas procedían de Siria y llegaron desde Turquía y Líbano. Las otras seis personas acogidas por nuestra entidad eran oriundas de Nicaragua, aunque estaban refugiadas en Costa Rica.

El reasentamiento consiste en el traslado de personas desde un país de asilo a otro que se compromete a reconocer su condición de refugiadas y a proporcionarlas una acogida con las adecuadas garantías. La vía del reasentamiento se toma cuando el primer país de asilo no puede garantizar la seguridad de la persona refugiada; cuando ese país no puede afrontar por sí solo la acogida de un número elevado de personas como consecuencia de una gran crisis humanitaria o cuando en el segundo país de asilo existen mayores y mejores posibilidades para su proceso de integración social.

Con el reasentamiento estamos hablando de una vía que permite al tiempo apoyar a las personas refugiadas, proporcionando una oportunidad de vida en un lugar seguro y, al tiempo, aliviar el esfuerzo que deben afrontar los países limítrofes. El reasentamiento es una de las vías legales y seguras que Accem, al igual que muchas otras organizaciones, defiende para dar respuesta a la necesidad de protección y seguridad de las personas refugiadas.

El año pasado, este programa se proponía el reasentamiento en nuestro país de 1.200 personas. Según informa el propio Ministerio, este objetivo se ha cumplido en un 90 %. Las personas que fueron reasentadas en España a lo largo del año procedían fundamentalmente de Turquía, Líbano y Costa Rica, y su origen estaba en Siria y Nicaragua.

Siria y Nicaragua, los países de origen de las personas reasentadas en España

En el caso de las personas que fueron reasentadas en España desde Líbano y Turquía, se trataba, según los datos de los que disponemos, de personas refugiadas originarias de Siria, país inmerso desde 2011 en un grave conflicto. Sobre las causas que han llevado a más de seis millones de sirios a convertirse en refugiados, te recomendamos consultar nuestro Atlas de Refugio. Líbano y Turquía, como países limítrofes de Siria, son dos de los Estados que desde el inicio del conflicto han tenido que asumir la recepción y acogida de gran parte de las personas que huían de la guerra. Actualmente, con los datos de ACNUR de 2023, Turquía continúa acogiendo a más de 3.330.000 refugiados de origen sirio y Líbano a más de 795.000 refugiados.

También es de reseñar en el recorrido del programa durante 2023 que la llegada de los dos grupos de personas refugiadas procedentes de Turquía en cuya acogida participó Accem, que tuvo lugar, respectivamente, en los meses de marzo y mayo, se produjo en el contexto de las consecuencias sobre la población refugiada radicada del grave terremoto acaecido el 6 de febrero en el país euroasiático. En estos dos grupos viajaron un total de 250 personas, de las que Accem asumió la acogida de 34 de ellas.

Por otra parte, y como novedad el pasado año, se habilitó esta vía segura de acceso a la protección internacional en España para personas originarias de Nicaragua refugiadas en Costa Rica. Actualmente, Costa Rica acoge a más de 180.000 personas entre refugiadas y solicitantes de asilo procedentes de su país vecino, Nicaragua, inmerso desde hace años en una situación de gran inestabilidad política y persecución gubernamental a los grupos opositores.

La acogida en España de estas personas que llegan a través de la vía del reasentamiento se realiza en el marco del Sistema de Acogida de Protección Internacional, del que Accem forma parte. Nuestra entidad participa en el PNR proporcionando acogida a las personas reasentadas y acompañándolas en su proceso de inclusión social.

El perfil de las personas acogidas por Accem a través del reasentamiento corresponde a familias formadas por uno o los dos progenitores junto a varios hijos e hijas. Esto explica el elevado número de menores de edad, que fue de 46 sobre el total de 89 personas acogidas por Accem, es decir, el 52 % del total. Esto significa que esta vía supone también una protección para la infancia refugiada.

El Gobierno aprueba la acogida en 2024 de hasta 1.200 refugiados a través del reasentamiento

El Consejo de Ministros aprobó el 9 de enero el Programa Nacional de Reasentamiento para el año 2024. El objetivo del Ejecutivo se mantiene en el reasentamiento en España de un máximo de 1.200 personas refugiadas a lo largo del año a través de esta vía.

El programa de reasentamiento se aprueba a instancias del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. En la ejecución del PNR participan diferentes instancias del Estado: el Ministerio del Interior, el Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación y el citado Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones. Participan, asimismo, en el proceso de selección de las personas que serán reasentadas, agencias internacionales de Naciones Unidas, como ACNUR (Alto Comisionado para las personas refugiadas) y la OIM (Organización Internacional para las Migraciones).

La ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, ha expresado asimismo la intención del Gobierno de abrir “vías complementarias al reasentamiento” con el objetivo de “ampliar las cifras globales de personas que son reasentadas en España”. En este contexto de vías complementarias se enmarca el proyecto piloto en el que Accem participó también en 2023 para la “migración regular, ordenada y segura por vías complementarias de movilidad laboral”. Este proyecto, fruto de una colaboración con el Gobierno de los Estados Unidos, se aprobó el pasado año como una ampliación del Programa Nacional de Reasentamiento y está orientado a la acogida de personas refugiadas procedentes de América Central y del Sur. En el mes de diciembre, un total de 74 personas refugiadas de Nicaragua, procedentes de Costa Rica y pertenecientes a 25 unidades familiares, llegaron a España y fueron recibidas por Accem con un proyecto de inserción laboral en el parque fotovoltaico en Villalba de los Alcores (Valladolid).

> Conoce el trabajo de Accem con personas refugiadas.

Al menos 3.997 personas murieron en 2023 en la frontera sur de Europa

En el año 2023 murieron en la frontera sur de la Unión Europea al menos 3.997 personas, según los datos recopilados a través de Missing Migrants Project (disponibles a 19 de enero de 2024), el proyecto de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) que monitorea las víctimas que se producen a nivel global por el sistema de fronteras. Con esta cifra, el número de personas fallecidas o desaparecidas en la frontera sur del continente, en las aguas del Mediterráneo o el Atlántico, se incrementó en el último año en un 35 % con respecto a las 2.970 personas fallecidas que fueron contabilizadas el año anterior.

 

Personas fallecidas y desaparecidas en 2023
en la frontera sur de la UE. Por rutas migratorias 

En el arco mediterráneo murieron en el último año al menos 3.041 personas, que suponen un 26 % más sobre las cifras de 2022, cuando fueron 2.411 las personas fallecidas. Estos datos hacen que este último año haya sido el año más mortífero en el Mediterráneo desde el año 2017.

Dentro de la región mediterránea, la gran mayoría de las víctimas perdieron la vida en el Mediterráneo Central, en las rutas marítimas que desde las costas de Libia o Túnez se dirigen hacia Italia o Malta. Al menos 2.498 personas murieron en el Mediterráneo Central. En esta ruta se ha producido un incremento en el número de víctimas del 76 %. Los datos de la OIM indican que es la ruta en la que se producen más muertes de cuantas se dirigen a Europa.

En el Mediterráneo Occidental, en las rutas que desde las costas de Marruecos o Argelia se dirigen a España, fallecieron al menos 457 personas. Finalmente, en el Mediterráneo Oriental, área en la que las rutas marítimas se dirigen hacia Grecia y Chipre fundamentalmente desde las costas de Turquía, murieron en 2023 al menos 86 personas.

 

Personas fallecidas y desaparecidas en el Mediterráneo
Serie histórica

Frontera Sur - Fallecidos Mediterráneo - Serie histórica

Por otra parte, en la llamada ruta atlántica, que une las costas de África Occidental con las Islas Canarias, fallecieron o desaparecieron en 2023 un total de 956 personas, un 71 % más que las 559 personas muertas que la OIM contabilizó en 2022.

Como siempre hay que subrayar cuando se abordan los datos de las muertes en las peligrosas travesías hacia Europa que emprenden las personas migrantes, tenemos que hablar de datos estimados, con toda probabilidad a la baja, sobre el total de víctimas de las migraciones y el sistema de fronteras. Se nos hace necesario también hacer hincapié en que tras la frialdad que trasladan los números y los porcentajes, se encuentran personas de carne y hueso, con nombres y apellidos, sueños y anhelos, familias y amistades, que emprendieron ese viaje en busca de una vida mejor.

 

Personas fallecidas y desaparecidas
en la ruta migratoria atlántica África – Islas Canarias
Serie histórica

Frontera Sur - Fallecidos en ruta atlántica - Serie histórica

Si ponemos el foco en la frontera sur española, tendríamos que unir los datos de las muertes y desapariciones que se produjeron en el Mediterráneo Occidental, que fueron 457, junto a las de la ruta atlántica, que fueron 956. En total, siempre con los datos de la OIM como referencia, habrían sido 1.413 las personas muertas o desaparecidas intentando llegar a nuestro país. Con respecto al año anterior, cuando murieron al menos 1.170 personas en el camino hacia nuestras costas, se habría producido un incremento del 21 % en el número de personas fallecidas.

Ante esta tragedia repetida año a año en la frontera sur de Europa, desde Accem continuamos defendiendo que existan vías legales, reales y seguras que permitan a las personas refugiadas y migrantes tener alternativas posibles a un viaje tan peligroso en el que se ven forzadas a arriesgar sus vidas.

 

Personas muertas y desaparecidas en 2023
en la frontera sur de España. Por rutas migratorias

Caminando Fronteras recoge 6.600 personas fallecidas sólo en la frontera sur española

La organización Caminando Fronteras, que monitorea y da testimonio de la tragedia humanitaria que se vive en la frontera sur de Europa, ha presentado asimismo su informe Derecho a la Vida 2023, elaborado por su Observatorio de Derechos Humanos, y que presenta cifras de personas fallecidas, relativas a las rutas marítimas entre África y España, sensiblemente superiores a las de la Organización Internacional para las Migraciones. Según sus datos, 18 personas murieron cada día en la frontera sur, intentando alcanzar las costas españolas, para sumar en todo 2023 un total de 6.618 fallecidos, cifra que multiplica los datos de la OIM. El año anterior, 2022, recogieron la muerte de 2.390 personas, y un año antes, en 2021, de un total de 4.639 personas.

Según el trabajo de esta ONG, la gran mayoría de las víctimas se produjeron en el Atlántico, en las rutas migratorias marítimas que desde África Occidental se dirigen hacia el archipiélago canario. Fueron 6.007 las personas que perdieron la vida en el Atlántico en 2023, intentando alcanzar las costas canarias desde Marruecos, Mauritania, Senegal o Gambia. Asimismo, han detectado que un total de 84 embarcaciones desaparecieron en el mar con todas las personas que viajaban a bordo. Junto a ellas, 611 personas murieron en las distintas rutas que se dirigen hacia la Península Ibérica: en el Estrecho recogen la muerte de 147 personas; en el Mar de Alborán, de 30 personas, y en la ruta argelina hacia el Levante peninsular, de 434 personas. Caminando Fronteras recoge, entre el número de víctimas, la presencia de 363 mujeres y 384 niñas y niños.

 

Mucho más que juguetes: un día de magia e ilusión para niñas y niños en Madrid

Por tercer año consecutivo y gracias a la colaboración con la Fundación Crecer Jugando, niños y niñas de familias solicitantes de protección internacional procedentes de Ucrania, Afganistán, Perú y Colombia, entre otros países, y, atendidas por Accem, han recibido juguetes con motivo de las celebraciones navideñas para que disfruten junto con sus amistades y familia.

Gracias a estos años de colaboración se han entregado más de mil juguetes a niños y niñas de familias refugiadas y solicitantes de protección internacional en Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana y Madrid, entre otros territorios.

Este año, la entrega en Madrid se ha realizado de una forma muy especial. Además de llevar a cabo el reparto de regalos que simboliza la magia de la temporada navideña, los niños y niñas asistentes han disfrutado de una jornada de intercambio cultural en la que han coloreado, compartido dulces navideños y llenado de color sus rostros en un divertido taller de pintacaras, acompañados también de sus familiares.

Tras las diferentes actividades y los nervios contenidos, llegó el momento de abrir los regalos. Paquetes de diferentes pesos y tamaños entre los que se encontraban bicicletas, puzles, juegos de mesa, muñecas, tractores, globos terráqueos y libros sorprendieron a los pequeños protagonistas de la jornada y permitieron que jugasen y compartiesen entre ellos, evidenciando que el juego es un lenguaje universal que no entiende de barreras lingüísticas y fronteras.

En estos días de ilusión, acciones como esta demuestra que los juguetes no son solo juguetes. Estos regalos ponen de manifiesto el derecho fundamental al juego para todos y todas y representan el compromiso de Accem con una infancia feliz y plena, que crezca en entornos seguros y con igualdad de oportunidades.

> Conoce todo el trabajo que realizamos con personas y familias refugiadas y solicitantes de protección internacional

Cómo se articula la Protección Internacional en España

Este 2023 ha sido un año indudablemente marcado por la emergencia humanitaria derivada del repunte de llegadas por vía marítima a las Islas Canarias y la posterior gestión de la acogida en el archipiélago y en la península. Los flujos de personas que realizan esta ruta son mixtos, es decir, hay migrantes pero también hay solicitantes de Protección Internacional. Personas que se ven en la necesidad u obligadas a poner en riesgo sus vidas en busca de la seguridad que no pueden tener en sus lugares de origen. 

Lo que se conoce como Protección Internacional engloba el Derecho al Asilo, la Protección Subsidiaria y la protección concedida por razones humanitarias. Las personas que son beneficiarias del primero de estos derechos son las que se conocen como refugiadas, es decir, aquellas que debido a fundados temores de ser perseguidas por motivos de raza, religión, nacionalidad, opiniones políticas, pertenencia a determinado grupo social, de género u orientación sexual, se encuentran fuera del país de su nacionalidad. 

Para dar protección a estas personas, la red de acogida estatal coordinada por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones y de la que forman parte organizaciones como Accem, trabaja para garantizar que se cumplen los derechos de estas personas, además de proporcionales un acompañamiento en un proceso de integración social que lleva consigo actuaciones para el aprendizaje del idioma, asesoramiento en trámites administrativos como la obtención de la tarjeta sanitaria o el registro en la Seguridad Social y orientación jurídica y laboral, entre muchas otras muchas. 

 

Sistema de Acción Concertada Protección Internacional

La financiación del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, enmarcada en el sistema de Acción Concertada, un programa cofinanciado por la Unión Europea, permite que Accem y otras organizaciones trabajen en la atención y acogida de estas personas solicitantes de Protección Internacional. En este contexto, la entidad ha atendido, entre enero y noviembre de este año, a un total de 24.551 personas en el programa de Protección Internacional, siendo, en este orden, Ucrania, Venezuela, Colombia, Perú y Senegal, los principales países de origen de las personas a las que la organización ha dado apoyo.

Este sistema de gestión de la acogida, que viene funcionando desde hace años en nuestro país, se reformula bajo la Acción Concertada para afianzar el vínculo con las ONG colaboradoras, consolidando un sistema mixto de gestión que favorece el intercambio de información y permite a las entidades mejorar la planificación de recursos, incluidos los humanos, dotando al personal de mayor estabilidad y, por ello, mejorando la atención que se presta a los/as solicitantes y beneficiarios/as de Protección Internacional. El Ministerio planifica, desarrolla y gestiona el sistema de acogida, estableciendo, a través de la Dirección General de Atención Humanitaria y del Sistema de Acogida de Protección Internacional, los procedimientos, prestaciones y actuaciones, en base a las directrices del Reglamento que regula el Sistema de Acogida.

Por su parte, la red de ONG, entre las que se encuentra Accem, trabaja en la atención y acogida de estas personas, mediante acompañamiento en la integración social, con el objetivo final de que estas cuenten, en el menor tiempo posible, con un proyecto de vida autónomo en nuestro país. Para ello, se establece un sistema de tres fases, que contemplan diferentes momentos del proceso de integración: la Fase de Valoración Inicial y Derivación, la Fase de Acogida y la Fase de Autonomía. 

Así pues, cuando las personas solicitantes de protección internacional llegan a España se activa la Fase de Valoración Inicial y Derivación, en la cual se analiza y se evalúan las circunstancias de cada persona de manera individualizada. En esta etapa, se atienden los requisitos de información y orientación sobre el sistema de Protección Internacional, a la vez que se cubren las necesidades básicas más urgentes, como la atención sanitaria o psicológica o la falta de productos básicos de ropa o higiene. Asimismo, se valora si las personas cumplen con los requisitos para la asignación de una plaza en la red de acogida, incidiendo en la detección de vulnerabilidades tales como casos de posibles víctimas de trata o violencia machista, entre otras. Accem ha atendido, entre enero y noviembre, a 17.217 personas en esta fase.

Posteriormente, los/as solicitantes que cumplen con los requisitos, pasan a la Fase de Acogida, en la que se les asigna una plaza del Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, por medio de la acción concertada con entidades como Accem, en un alojamiento adecuado al perfil de la persona o núcleo familiar y a sus necesidades. Durante esta fase, se asigna a una persona del equipo del trabajo social el expediente de esta persona o familia, haciendo seguimiento de su proceso de integración social. En esta etapa, se ofrecen servicios como el del aprendizaje del idioma, atención jurídica, talleres de contextualización social, acompañamiento en procesos de escolarización de menores de edad, obtención de tarjeta sanitaria o número de la seguridad social y acciones de orientación laboral para la inserción en el mercado de trabajo. En esta fase, Accem ha atendido a 6.823 personas a lo largo de los 11 primeros meses de 2023.

El último de los ciclos del sistema es la Fase de Autonomía, que tiene como finalidad hacer efectiva la plena inclusión en la sociedad. Entre las acciones que las entidades llevan a cabo en esta etapa, en la que las personas o familias ya abandonan el recurso de acogida proporcionado por el Ministerio y las ONG, están la prestación de apoyo social, psicológico, jurídico y cultural, así como continuar con el aprendizaje del idioma, proporcionar asesoramiento sociolaboral y apoyo en el acceso a programas de formación, facilitar servicios de traducción e interpretación y apoyar la conciliación de las actividades que tenga que desarrollar la persona destinataria con su vida personal y familiar. En esta fase, Accem ha atendido a 3.360 personas entre enero y noviembre. 

El sistema de acogida de Protección Internacional, del que forman parte las ONG y que está coordinado por el Ministerio de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones mediante el sistema de Acción Concertada tiene por delante muchos retos en materia de migración y asilo, como los tiene la propia Europa. Por eso el papel de la Comisión Europea cofinanciando este sistema es fundamental. Situaciones de emergencia humanitaria, como la derivada de la invasión rusa de Ucrania, la toma del poder de los talibanes en Afganistán o la guerra de Siria, ponen de manifiesto lo necesario de contar con un sistema de acogida, basado en alianzas, suficientemente fuerte para dar respuesta a las diferentes crisis humanitarias que se están produciendo y pueden producirse en el futuro.

III concurso “Palabras e imágenes que son refugio”: tendiendo puentes con las personas solicitantes de asilo gracias a nuestra lengua

Un año más, desde nuestro servicio de aprendizaje del idioma hemos organizado la tercera edición del concurso “Palabras e imágenes que son refugio”, una iniciativa con la que favorecer el uso del español de forma creativa y enriquecedora y dar voz a la experiencia en España de las personas solicitantes de protección internacional.

En esta edición nos alegramos de haber batido récord de participación con un total de 208 personas que presentaron al concurso una fotografía y un texto, ambos originales, en los que contaban algo significativo de su experiencia en España y lo comparaban con su lugar de origen desde una perspectiva intercultural.

El pasado 21 de noviembre se realizó el anuncio del fallo del jurado con las personas ganadoras y mostramos los textos y fotografías más significativas de cada categoría en un acto emocionante en el que disfrutamos y compartimos la alegría de todas las personas participantes. Hubo un primer premio, un segundo premio y menciones especiales en cada nivel. Al acto, que se desarrolló de manera online y estuvo abierto a todo el público, acudieron más de 100 personas de diferentes ciudades como Barcelona, Huelva, Sevilla, Castellón y Madrid, entre otras muchas.

Entre las fotografías y los textos ganadores descubrimos lugares como el puerto de Castellón, la playa de Badalona, un campo de girasoles en Sigüenza, la calle Mayor de Guadalajara, una playa de Cartagena, las montañas en Calatayud… y cómo estos lugares son un lugar de refugio para miles de personas en nuestro país. Además, también disfrutamos de más relatos y fotografías que nos mostraban historias sin fronteras, que merecen ser escuchadas.

Os dejamos a continuación con el vídeo de los ganadores y esperamos que, en 2024, se sumen aún más estudiantes a la próxima edición de este concurso, podamos seguir conociendo nuevos testimonios y continuemos fomentando el uso del español como lengua para seguir tendiendo puentes entre las personas solicitantes de asilo y nuestra propia sociedad, su sociedad de acogida.